Hoy, con lo del día nacional del país y sobre todo con el cumpleaños de Shakespeare, se menciona muy poco que esta es también la fecha del cumpleaños del más grande pintor que ha producido este país y uno de los más grandes de la historia de la pintura occidental, Joseph Mallord William Turner, ‘El Pintor de la Luz’.
Al igual que Shakespeare, no se sabe con certeza el día exacto de su nacimiento aunque el mismo artista afirmó toda su vida haber nacido el 23 de abril y esta es la fecha que conmemoramos hasta hoy en día.
Turner es hoy en día el pintor inglés más celebrado en este país y aunque durante su vida llegó a tener mucho éxito financiero como pintor, durante casi toda su carrera fue muy controvertido, algo que atribuimos hoy en día al hecho de ser poco comprendido por sus contemporáneos (como sucede con casi todos los genios, que no llegan a ser entendidos y propiamente valorados hasta después de sus muertes).
Turner nació en Covent Garden; su padre era barbero y su madre provenía de una familia de carniceros. Fue bautizado en la iglesia de St Paul’s en la Piazza de Covent Garden y casi toda su vida residió aquí en Londres, sobre todo muy cerca del río ya que el Támesis y el mar eran sus grandes pasiones. Turner pasaba largas horas dibujando los paisajes del río y su mayor interés era el reflejo de la luz en el agua, acompañado de un intento por capturar todos los matices de este fenómeno físico. Esta obsesión y la maestría que logró representando el sol y la luz en sus cuadros lo llevaron a ser considerado por muchos como el más grande ‘Maestro de la Luz’.
Turner también elevó el arte del paisajismo al mismo nivel de la pintura histórica. A finales del siglo XVIII y hasta muy entrado el XIX la máxima expresión de arte y habilidad en este país se le adjudicaba a la pintura de cuadros de escenas históricas o mitológicas, mientras que los paisajes eran considerados un arte inferior, propio de artistas menos habilidosos y de menor rigor intelectual. Turner cambió este paradigma completamente con sus óleos y acuarelas y hoy en día se considera que sus cuadros sentaron las bases del impresionismo.
Durante su vida Turner se negó a vender muchas de sus obras, por las que sentía un gran apego, y al final de ella dejó un gran número en “herencia” a la nación. De hecho la condición que estipuló en su testamento era que dejaría su gran obra al país si toda ella se llegaba a exponer junta en un mismo edificio. Afortunadamente para muchos, no tanto para otros, este requisito nunca se cumplió y hoy en día muchas de sus obras están dispersas por el mundo. De todas maneras un buen número de ellas se pueden apreciar aquí en Londres en la National Gallery y la Tate Britain.
La admiración por Turner parece estar aumentado con el tiempo, como lo atestiguan numerosas exposiciones que se han realizado en el mundo en los últimos años, en especial las del Museo Metropolitano de Arte de New York, la de la National Gallery of Art de Washington, la del Louvre, la del Prado en Madrid y aquí en Londres hemos tenido la fortuna de ver varias muestras en los últimos años, como Turner and the Sea en el Museo Marítimo de Greenwich y Late Turner en la Tate Britain.
Aquí en Londres en Español le deseamos un feliz cumpleaños a un gran pintor del que se dice que fue un verdadero londinense que hasta hablaba con acento cockney!